No me gustó. Hasta el extremo de que al llegar a la mitad hice algo que nunca hago: irme al final. Que ya me lo estaba imaginando y que tampoco me gustó. Como aspectos positivos destacaría la parte técnica, la pericia del autor para encadenar diálogos sin puntos, sin guiones, todo ello sin que afecte a la fluidez y comprensión en la lectura. En cuanto al conjunto me resultó soso, de lectura aburrida y demasiado previsible tanto en el desarrollo como en el desenlace. Por último destacaría que me transmitió una sensación de cierta ingenuidad tanto en el comportamiento de los personajes, como en el sentido global de la novela.
hace 6 años