Este autor se ha convertido para mi en una garantía de lectura amena y ,casi siempre, divertida. Es muy ingenioso y tiene un talento especial para jugar con los dobles sentidos del lenguaje en favor de crear situaciones cómicas. En esta novela hay pasajes verdaderamente hilarantes. Tal vez, de tan cómica, la novela me ha resultado un poco recargada, sobre todo en comparación con el humor más sutil de las anteriores. Sin embargo es un pero menor porque su lectura es fácil, amena y divertida.

Tiene alguna cosa graciosa, pero en general me pareció una gran pérdida de tiempo. Al leer la sinopsis te imaginas algo completamente diferente, y realmente te encuentras con un relato que va degenerando hasta convertirse en algo surrealista y grotesco.

En cada página de este libro hay inteligencia, cachondeo, brillantez y un sin fin de juegos de palabras conceptuales. Es un libro extraño, divertido hasta el infinito, mordaz, provocador, audaz y de lo más gamberro que he leído jamás. Muy necesario.

Una diarrea de chistes malos, tantos que hay alguno que llega a hacer gracia. Una escenas de sexo cuyo argumento diría que están sacadas de una peli porno, si no fuera porque en el ultimo piso realmente se graban películas para adultos... Al final en vez de la inteligente semblanza de los libros de misterio que esperaba me he encontrado una parodia chabacana.