La novela tiene sus defectos pero la verdad es que lo he pasado bien leyéndola, es mucho mas divertida de lo que esperaba. El vicario es un buen hombre, cargado de buenas intenciones pero algo ingenuo. Es admirable la paciencia que tiene, la filosofía con la que se enfrenta a la sucesión de calamidades que azota a su familia. Al principio la novela me recordaba mucho a Austen, por el costumbrismo y la ironía de los primeros capítulos, si en lugar del punto de vista de las chicas tuvieramos el del padre. Después cambia el tono y es mas del estilo de Dickens, por las coincidencias asombrosas, por la manera en que acaba resolviendose todo. Creo que Goldsmith puede haber influido en ambos autores.
hace 7 años