Estupenda novela de escollos, de flujos y reflujos de marea... de inquietudes emocionales por parte de unos personajes que se han quedado varados por los maltratos que da la vida. Gente perdida, que no se resigna a la derrota, y que buscan como buenamente pueden salir de esa sima fragante o perfumada que trae la bruma del río. Basada en una etapa muy determinada por la que tuvo que pasar la autora, refleja muy bien esa existencia bamboleante de subidas y bajadas. De desazones y de ansiedades humanas. A Impedimenta darle las gracias por esta edición tan bonita y tan cuidada.
hace 6 años