Resumen

En plena juventud, David Torres descubrió que llevaba el mismo nombre de ese hermano mayor, que murió -¿o fue robado?- en una de las infames clínicas dedicadas al tráfico de recién.

El recuerdo permaneció larvado durante décadas hasta que emergió de repente cuando intentaba por enésima vez escribir una novela imposible: la historia de los cientos de músicos ciegos exterminados en los terribles años de las purgas estalinistas. Palos de ciego es también un enfrentamiento con la memoria, con las víctimas olvidadas y las inventadas entre los hitos de la historia y el humo de las leyendas.

1 Críticas de los lectores

8

Dice el crítico Nadal Suau: "... Torres se sirve del lenguaje musical, del contrapunto a las armonías, para explicar Palos de ciego y su prodigiosa construcción, pero sería igual de exacto atribuirle una lógica poética a los insólitos pasadizos que establece entre lo real, lo posible, lo vivo, lo muerto, lo histórico y lo privado. El resultado es deslumbrante." Lo corroboro: me ha deslumbrado.

hace 6 años