Resumen

El nadador contempla su futuro: así lo hace Jonás cada mediodía, cuando comienza a encadenar brazadas, mientras al otro lado de las vidrieras de la planta de arriba del pabellón unas sombras esbeltas parecen observarlo; pero no sólo a él, sino también al resto de los nadadores. Para nadar en esa piscina, Jonás cruza toda la ciudad: es una de las pocas rutinas que le quedan de cuando todavía vivía con Ada, muy cerca de allí, en la zona norte, de altos rascacielos, y la fotografía aún le importaba como algo más que una manera de ganar dinero. Ahora vive solo, en un estudio al sur de la ciudad, y se conforma con ver la vida de los otros.
Novela sobre la soledad y el sentido de la existencia, profundamente simbólica y de clara raigambre kafkiana. Los nadadores refleja el vacío y el sentido de pérdida de la vida contemporánea. 

1 Críticas de los lectores

3

¿Falsa vacuidad? ¿Vacua falsedad? Palabras amontonadas sin sentido ni interés. Unas descripciones pretendiendo el Ulises -el de Lloyce, obviamente- que se quedan en la línea de salida. Unos personajes que no pueden ser más artificiosos. Unas situaciones improbables por simplistas y por la falta de certificación: por ejemplo, uno supone que el autor es nadador pero lo que ocurre en la piscina es simplemente inverosímil. Me gustaría conocer el porqué de las profesiones de cada personaje, qué valor le atribuye el autor a esas ocupaciones que él demuestra conocer tan poco: el fotógrafo, el inspector, el contable (experto en macroeconomía?!)... Las relaciones humanas completamente descafeinadas y vacías. Es todo tan malo... Y al final, la gente que empieza a desaparecer. En la contracapa se habla del simbolismo de las desapariciones. Da la impresión de que se producen porque el autor no sabe qué hacer con la novela. Y esto lo publica Anagrama...

hace 6 años