"El señor de las moscas es bastante fácil de explicar; Por razones no muy claras un avión se estrella cerca de una isla y deja abandonados a cerca de 30 niños en un lugar alejado de la humanidad. Ellos, ahí solos, tendrán que organizarse para sobrevivir y buscar la manera de ser rescatados.
Este simple planteamiento sirve para desarrollar muchos otros aspectos interesantes, desde la perdida de la inocencia hasta el análisis del comportamiento humano ante la falta de reglas establecidas por la sociedad. Todo esto claro, llevado de la mano de unos niños que se ven de pronto libres de la supervisión adulta, en una isla que ahora es solo suya.
William Golding tiene una narración sencilla y clara, nos permite saltar dentro de todos los personajes, para así conocerlos un poco más a profundidad. Entender sus miedos, dudas, complicaciones y sus habilidades natas. Aunque cuando llega el momento de dibujar el entorno debo aceptar que llego a confundirme. Nunca fui capaz de dibujar en mi imaginación las letras que ahí tenía, encontraba contradicciones, descripciones profundas seguidas de unas bastante vagas, incluso llegue a confundir el entorno, lo que creí bastante alto resultaba ser un simple borde y después llegaba una descripción más profunda.
Para mi fortuna, esto último solo fue pocas veces y supongo que entendible, debe ser bastante complicado mostrar la complejidad y los entretejidos de una isla desierta."
Nota completa en http://contraelpromediomexicano.com/2013/06/14/fin-el-senor-de-las-moscas/
hace 11 años
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