Aviso para lectores: en Francia los culebrones familiares ganan el prestigioso Goncourt, o al menos lo ganaban allá por 1948. Como novela tiene el mismo atractivo que La Regenta, lo que no es decir poco; pero a la vez queda igual de lejana y superada en su temática y redacción, de un estilo costumbrista en el que se nota en exceso el paso del tiempo. ¡Qué cerca está Francia y sin embargo qué lejos de nosotros su literatura!, a menos, claro, que se haya estudiado francés en el colegio. Una propuesta distinta, curiosa.
hace 15 años