Kate Blackwell dirige una gigantesca corporación internacional. Su éxito y su poder son el premio en el juego insaciable dónde destruye a sus oponentes. La historia de la familia comienza en 1883 cuando el padre de Kate se dirige a África del Sur para tentar suerte en las minas de diamantes. Kate dominará más tarde el clan familiar, manipulando sin compasión las vidas de los que la rodean, incluso la de su propio hijo, cuya vocación artística es arteramente desbaratada.