En el verano de 1992, dos bombas segaron la vida de tres magistrados ?Giovanni Falcone, su mujer Francesca Morvillo y Paolo Borsellino? y los ocho jóvenes que los escoltaban. La mafia siciliana asestaba su golpe más letal, pero sus víctimas dejaban un imborrable legado de heroísmo cívico en un país...