Ahora que se acerca Halloween toca coger lecturas perturbadoras, de esas capaces de provocarte un escalofrío. Son muchas las historias de terror que podemos leer, pero a veces la realidad supera a la ficción, como es el caso de este manga. La obra de Seiji cuenta de forma muy suavizada la historia real del secuestro de una joven japonesa y, si bien está cargada de momentos terribles, por desgracia el caso real fue mucho peor. Aviso de que es un manga que puede herir sensibilidades, y el caso en el que se basa mucho más. Si bien decir que el caso se ha suavizado puede sonar a crítica, lo cierto es que me parece un acierto, ya que así es posible llegar a muchos más lectores sin caer en el morbo de leer las peores escenas. No hacen falta unos dibujos explícitos para que podamos imaginar lo que sufre la pobre joven, y a pesar de la simpleza del dibujo es capaz de representar la desesperación de la chica. Esta es una historia que no debe ser olvidada, una de esas terribles que te reconcomen por dentro, pero que es necesario conocer. La obra esconde una gran crítica a la sociedad japonesa de hace años, poniendo el foco sobre problemas que continúan hoy en día, si bien en menor medida. Una historia escalofriante y terrible que, sin embargo, es mucho más leve que la realidad. Irbis.