EL MINISTERIO DEL TIEMPO: EL TIEMPO ES EL QUE ES

EL MINISTERIO DEL TIEMPO: EL TIEMPO ES EL QUE ES SCHAAFF, ANAÏS y PASCUAL, JAVIER

Resumen

En la biblioteca de un convento, alguien fotografía un códice del siglo VIII. Pasando páginas, llega a una en la que con caligrafía moderna se lee: «Me llamo Elías Sotoca y estoy atrapado en el año 780». Cuando la noticia llega al Ministerio del Tiempo, la sorpresa es total. Sotoca es un agente de alto nivel al que se dio por desaparecido hace años. Amelia, Alonso y Julián parten de inmediato hacia 780 para rescatar al compañero perdido. Tras la misión en el medievo, la patrulla acaba por error en Cartagena de Indias, uno de los puertos más importantes de la época colonial, en el año 1603. Allí deben convencer al capitán de uno de los galeones de que les permita embarcar, como paso previo para regresar a 2016. Pero entonces conocerán a un personaje histórico que sobrevive en el anonimato y que deberán salvar para que la historia no cambie. Cuando parece que todo ha terminado, se produce una emergencia que requiere la inmediata participación de los agentes; con apenas 20 años, Lola Mendieta que aún no ha ingresado en el Ministerio es detenida por los nazis en Canfranc. ¿El motivo? Ser espía de las fuerzas aliadas en la Segunda Guerra Mundial. Lo que en principio parece una sencilla misión de rescate se complicará hasta el punto de que la victoria final de los aliados sobre los nazis se ponga en peligro.

1 Críticas de los lectores

8

Una novela imprescindible para fans y seguidores de El Ministerio del Tiempo, la aclamada y multipremiada serie de RTVE creada por Pablo y Javier Olivares, que nos acerca de una forma espectacular a la Historia de España cuando las patrullas viajan al pasado por las puertas del tiempo para evitar que nada cambie. El libro nace de la serie y contiene tres misiones a épocas diferentes, dos de ellas inéditas: “El conde del tiempo” y “Después del buen tiempo, la tempestad”; mientras que la tercera “Tiempo de espías” sí ha sido llevada a la pequeña pantalla en el capítulo 23, de hecho es mi parte preferida del libro. Son 300 páginas que se leen en un santiamén, donde por supuesto no faltan aventuras, intrigas o las ironías que se gastan los personajes. Encima le pones rostro a los protagonistas, que ya conoces de la serie, y cuando lees los diálogos te imaginas la cara que pone en ese momento Alonso de Entrerríos, Julián Martínez, Amelia Folch, Ernesto Jiménez o Salvador Martí, tan entrañables y tan carismáticos cada uno de ellos. El libro es para disfrutarlo, es ágil, está bien narrado y se hace muy corto; indudablemente te sabe a poco comparado con la gran ficción televisiva. Así que a pasarlo bien y que vuestras misiones lleguen a buen puerto, ministéricos.

hace 5 años