Sigo sin comprender como una excelente escritora como Florencia Bonelli escribió estos dos últimos libros. El primero Jasy y este segundo de la trilogía. Al principio, mientras no estaba Aitor, era interesante y atrapaba. Una vez que llegó este indio de mal genio, de malos tratos y modales, antisocial, y enfermo de celos, (después nos sorprende la violencia de género) se convirtió en una novela erótica que no me erotizó en lo más mínimo, es más me cansaba. No lo recomiendo.
hace 9 años